El director general de Bellas Artes y Patrimonio Cultural del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, Luis Lafuente Batanero, y el presidente de la Fundación Iberdrola España, Manuel Marín, han inaugurado la nueva iluminación ornamental de la iglesia del Real Monasterio de Santa María de El Paular, en Rascafría (Madrid). En el acto participan, además, el prior del monasterio, Miguel Muñoz, y el presidente de la Asociación de Amigos de El Paular, Antonio Más Guindal.
El proyecto de renovación se ha acometido gracias al convenio de colaboración firmado entre la Fundación Iberdrola España y la Dirección General de Bellas Artes y Patrimonio Cultural en marzo de 2016, con el objeto de elaborar y ejecutar un proyecto de iluminación ornamental en la iglesia, acorde con las necesidades y la relevancia de sus bienes culturales.
Los trabajos, que comenzaron a principios de 2017, utilizan como base la tecnología LED más avanzada, atendiendo a la sostenibilidad y ahorro energético de la instalación, que ofrece una reducción en el consumo del 74% con respecto a los equipos anteriores. Asimismo, desde el punto de vista medioambiental, la mayor eficiencia energética permite evitar la emisión a la atmósfera de 2,1 toneladas de CO2 anuales.
El retablo: sistema de iluminación por escenas
El nuevo sistema contribuye a poner en valor la pieza más valiosa del conjunto monumental: el magnífico retablo de alabastro policromado, labrado en el Real Monasterio por los artistas de la escuela de Juan Guás a finales del siglo XV.
La nueva iluminación, dotada de 28 proyectores y completamente regulable, incorpora la última tecnología LED con unas fuentes de luz de altas prestaciones para la reproducción cromática y muy bajo consumo.
Con ello, permite mostrar este retablo a los visitantes de una forma mucho más didáctica, mediante una secuencia de escena a escena que posibilitará sin duda una mejor comprensión del significado iconográfico de esta excepcional obra, así como la percepción de los innumerables detalles que integran cada una de sus figuras.
Para hacer posible el encendido dinámico de las diferentes escenas del retablo ha sido necesaria la implantación de un sistema de control, que incluye una pantalla táctil programable con edición de botones para el manejo visual de las distintas zonas de la iglesia y del retablo, y con un software que permite la programación desde un ordenador o teléfono móvil mediante una aplicación específica.