Para ANFALUM, la acogida del Plan PREE (Programa de Rehabilitación de Edificios) ha sido muy positiva al incluir la iluminación como uno de los elementos en los que incidir a la hora de rehabilitar viviendas y locales, en términos de calidad de vida, seguridad, confort y eficiencia energética, ahorro y sostenbilidad.
El PREE, que fue presentado el pasado 21 de septiembre, está dotado con 300 millones de euros para llevar a cabo actuaciones de rehabilitación energética y disminución de emisiones de nuestros edificios, con un gran potencial de ahorro y de incorporación de energías renovables.
Un ambicioso programa coordinado por el IDAE, que tendrá convocatorias para acceder a las ayudas económicas en cada Comunidad Autónoma, y que contemplará ejecuciones en edificios y locales ya sean por empresas, empresas de servicios energéticos, administraciones o comunidades de propietarios.
Alfredo Berges, director general de ANFALUM instó a la Administración para que sea un ejemplo a seguir, priorizando el PREE en las actuaciones de edificios públicos, colegios, oficinas, hospitales, etc., para seguidamente actuar en el sector residencial y pequeño terciario.
Para Berges, la industria de la iluminación ya está preparada para este futuro prometedor, cuando hace años introdujo cambios en los procesos productivos y en las tecnologías aplicadas en iluminación.
«La sustitución de los equipos ineficientes, y la introducción de criterios de circularidad y sostenibilidad a los procesos productivos, hacen que todas las empresas representadas en ANFALUM estén preparadas para la transición verde». Una tendencia imparable secundada por el Green Deal europeo, y que se traduce en reconstruir la economía del viejo continente bajo criterios de sostenibilidad y huella 0 de carbono.