Sant Jordi Gràcia, es el nuevo albergue juvenil temático que la empresa catalana ha abierto en este barrio de moda en Barcelona. Esta vez, dedicado el mundo de las bicicletas de piñón fijo.
Arquitectónicamente, se trata de un pequeño edificio entre medianeras, ubicado en una calle peatonal, entre el concurrido teatro Teatreneu y la animada Plaça de la Revolució.
El albergue, de 400 metros cuadrados y 49 plazas, está distribuido en tres plantas. En planta baja encontramos la recepción, la sala, la cocina y una acogedora terraza. Las plantas superiores se distribuyen en 8 dormitorios y dos núcleos sanitarios. La azotea dispone de un solarium con hamacas, en las que también se celebran noches de cine al aire libre.
El interiorismo, nuevamente, se inspira en un deporte urbano que tiene toda una filosofía de vida detrás: las fixed gear bikes (bicicletas de piñón fijo). Sobre él se apoya la elección de materiales y el diseño de objetos y mobiliario.
Espacialmente, nos interesa la lectura de los volúmenes a través de la iluminación en línea. Una línea que alterna la luz continua y discontinua, a modo de carril bici y que nos descubre y nos guía hacia los cubos. Unos cubos, en forma de contenedor, que albergan las piezas clave del programa funcional. Esos cubos, a su vez, simulan desde la clásica tienda de recambios de bicicletas, hasta prisma de luz para acceder a las habitaciones, pasando por un contenedor de puerto donde se encuentra la cocina. Todos ellos, de distintas medidas, colores y materiales forman parte del argumento del proyecto.