Salamanca ha sido la sede del Festival de Luz y Vanguardia, un acontecimiento de carácter anual que ha convertido la capital salmantina en el centro nacional de referencia de una modalidad artística de reciente implantación en la que se unen el mundo de la plástica, el vídeo y la instalación.
En 1524, los dominicos construyeron el Convento de San Esteban en Salamanca, un edificio que mezcla estilos como el gótico o el barroco y que cuenta con una impresionante fachada plateresca. Casi 500 años más tarde, esta misma fachada ha sido “mappeada” para el Festival de Luz y Vanguardias que acaba de celebrar su primera edición y que ha tenido como protagonistas a los monumentos más emblemáticos de la ciudad. Tres proyectores Christie Boxer 4K30, gestionados por Sono, dispararon la friolera de 90.000 lúmenes para crear un espectacular mapping de proyección sobre el convento.
El Festival, organizado por Estudio de Comunicación, con la colaboración del Ayuntamiento de Salamanca y el apoyo de Iberdrola, ha tenido como escenario las calles de Salamanca y, dentro de ellas, edificios singulares sobre los que una selección de artistas invitados, estudiantes universitarios, artistas independientes y empresas del ámbito del vídeo y la instalación proyectaron sus creaciones, especialmente pensadas para las características arquitectónicas de los edificios elegidos.
Sobre la fachada del Convento de San Esteban se proyectó la obra Daylight de la artista Anna Barriball que mostraba las sombras de las hojas que tiemblan y se balancean en tiempo real, entrando y saliendo del foco. La naturaleza entró así de lleno en la fachada del convento, transformando su forma original e interactuando con la vegetación exuberante de los árboles que lo rodean.
La superficie de proyección fue de 17 x 21,9 metros, lo que hizo un total de 335 metros cuadrados. Sono decidió usar los Boxers por su potencia lumínica, ya que había que conseguir al menos 200 lúmenes por metro cuadrado. Los proyectores se ubicaron en un layher, y la distancia de proyección fue de unos 40 metros. Cada uno de los equipos cubrió un trozo de la fachada del convento, de forma que los tres iban blendeados. Como reproductor se utilizó el sistema Watchout, y la resolución total a la que se trabajó fue de 1700 x 2190.
El Christie Boxer 4K30, que cuenta con tecnología 3DLP® y que lleva incorporado el procesador de imagen Christie TruLife™ para ofrecer una calidad de imagen más real y nítida, ha ganado seis premios desde su lanzamiento en enero de 2015, a saber: Live Design Awards (EE.UU), InAVation Awards (Reino Unido), Premios Panorama Audiovisual (Brasil), AV Awards (Reino Unido), Rental & Staging Systems Award (EE.UU) y PIPA Awards (Alemania).
La participación de Christie de la mano de Sono fue más lejos, ya que tres proyectores Christie Roadster HD18K (tecnología 3DLP, 18.000 lúmenes, resolución HD) se utilizaron para otro mapping en el Patio de Escuelas de la Universidad de Salamanca, y otros dos proyectores Christie Roadster HD14K-M (tecnología 3DLP, 14.000 lúmenes, resolución HD) en la Casa de las Conchas.
Marcos Fernández, director de Christie para España y Portugal, afirmó que «estaban encantados de que los proyectores 3DLP, incluyendo el Boxer, se hayan usado en este evento tan creativo. La línea 3DLP de Christie cuenta con un amplio espectro de resoluciones y niveles de brillo que ofrecen un rendimiento sólido y fiable y un brillo uniforme para proyectar sobre casi cualquier estructura”.