Arquitectos: Esteban Terradas Muntañola y Josep Ferrando Bramona
El local donde se sitúa el Restaurante Icho se encuentra en un local de la planta baja del hotel NH Constanza, edificio diseñado por Rafael Moneo que concluye la actuación urbana que inició con el edificio de la Illa Diagonal.
El local, de unos 320 metros cuadrados, tiene un perímetro irregular. Aprovechando esta característica, la distribución divide el restaurante en dos partes bien diferenciadas: cocina y comedor. Una franja de servicio divide estas dos áreas, como si fuese un mueble en el que se guardan las vajillas, la cristalería, la ropa de mesa…
El Restaurante Icho se encuentra en la esquina entre las calles Déu i Mata y Constanza. Esta situación privilegiada permite que haya mucha luz natural cerca de las mesas, que se sitúan cerca de la fachada. La intención del proyecto es dotar de un ambiente acogedor al interior y la iluminación se transforma en un mecanismo para ambientar las diferentes estancias.
Por un lado, las fachadas se cubren con una malla de acero inoxidable a modo de cortinas. La luz exterior queda tamizada, creando un ambiente más íntimo y acogedor en el interior. Estas cortinas permiten observar el exterior sin ser observado desde fuera, manteniendo la privacidad de los clientes.
El techo se transforma en un elemento que aúna movimiento y luz para dotar de calidez a la zona de mesas. Unas lamas de madera esconden en el interior unas luminarias lineales que visten el techo con pequeños puntos de luz. Una luz tenue baña las lamas de madera y enfatiza los perfiles quebrados del falso techo. Todo el comedor tiene así una luz suave y uniforme que contrasta con el acero de la fachada. Se consigue con poca intensidad lumínica un ambiente cálido.